De Agua...

Y bueno, lo que faltaba, indispensable, incomparable… el agua. Que porque no podemos volar por nuestros propios medios, no lo se, pero bien que nos las arreglamos con los medios inventados y copiados a la madre natura, pero en el agua tenemos mas tregua no? como que somos pero no somos, como que claro nos faltan las aletas, las escamas y las branquias, pero puchas que nos sentimos bien chapuceando un rato, sin utensilios mecánicos extra ni faramallas cibernéticas, tu cuerpito y ya, mágico!! Será que como la física amiga nos libera de un porcentaje importante del peso que la gravedad terrestre nos asigna sin derecho a alegar, y mas livianos, mas ligeros, mas fluidos, todo bien!!
Este es uno de mis placeres, uno de mis barómetros, mis ecualizadores, tirarme al agua, dejarme llevar, hundirme de pies a cabeza, flotar... es como un suspiro largo y profundo, como un paréntesis, como no estar, ser tu y el agua, y tu respiración que mágicamente te mantiene colgada en el horizonte, entre el aire y al agua… No es que tenga complejo de sirena, pero cada cierto tiempo necesito hundirme en al agua, ojala de una fuente natural, mar, lago, río, si no se puede una piscina cualquiera puede servir, incluso una tina rebalsante, pero como que se me va el calor y con el calor, todo el peso del dia, de la semana, del mes, la reunión inútil del lunes pasado, el reporte pendiente en el escritorio, el agente cívico que viene a pedir por enésima vez que le paguen el mes que NO trabajo, la rabia, la angustia, la pena… todo bien, piiioooolaaaaahhhh….

Tal vez sean los ancestros cetáceos que todos tenemos, no? O soy solo yo?
Aquí tenemos mar por todos lados, aunque lo veamos poco y nada en nuestra agitada cotidianeidad, era que no, estando en una isla, pero las costas por estos lados son accidentadas, olvídate de las playas paradisíacas de arena blanca, palmeras y aguas calipso, aquí la cosa es roca, roca y roca. Tenemos un solo pequeño espacio libre, que llamamos playa, y que se llama Anse d’Azur, que vendría siendo como la bahía azul (na’ que ver con la laguna azul), y tal cual poh! Son humildes pero dignos 200 mts de litoral, con un poco de piedras, otro poco de algas y su restito de arena, cuando las mareas son gentiles y la mar esta calma parece realmente un rincón del cielo, hasta tiene su propio submarino hundido (te juro!). La playita esta es la única en kilómetros a la redonda, asi que la compartimos con todo aquel que necesite su dosis de sol y sal, sea policía, soldado, civil, internacional o local, con lo que la cuota se llena bastante rápido, sobretodo los domingos de sol, y vaya la fauna que hay sobre la arena en estos dias!! Gracias a dios en el agua somos menos, ya que no todos se alejan de la ola de la orilla para ir a flotar a la deriva…

Fotos: Guillaume Devars / Angela Briceno

Hablando en serio, yo que soy citadina del valle central, nunca había vivido tanto tiempo tan cerca del mar, y me asombro cuando cada vez que lo miro, es como si por los ojos me entrara la calma, la paz, como si en su inmensidad me recordara que nada es tan grave, que todo puede cambiar, que la vida sigue y esta, y me deja respirar…
Algo que queda pendiente, aprender a navegar…

…A Marcielo y su Sirena